Somos una marca colombiana nacida en el corazón de Santander de donde proviene nuestra familia de tradición joyera. Desde siempre, hemos sentido una profunda admiración por las joyas que nuestra tierra produce, especialmente las esmeraldas. Fue este amor por nuestras raíces lo que nos inspiró a crear una marca que lleve consigo la murralla como símbolo de nuestra identidad, con el propósito de convertir cada joya en una obra de arte única que refleje la esencia de nuestra cultura.